Sonrisas y lágrimas

Es curioso como un gesto puede hacer que algo malo sea peor o que algo bueno sea mejor. Hoy, el día en el que este país descubre lo que significa que lo engañen sin parar, un gesto ha hecho que algo malo sea peor.
¿Que gesto? Pues el de unos ministros/secuaces de Rajoy puestos en pie aplaudiendo tras anunciar éste el mayor de los recortes de la historia de España. Esto podría parecer sacado de una película de humor, una comedia que parodie la democracia, pero no. Esto es real.
Las medidas creo que las conocemos más o menos todos. Me pondría a criticar una a una todas ellas pero lo que me apetece ahora es explicar por qué creo que hemos llegado hasta aquí.

Cuando comenzó la crisis se hicieron muchas cosas mal. Pero creo que la base de hacer las cosas mal es ir en contra de tus principios. No creo que los políticos entiendan de eso. Zapatero traicionó sus principios aprobando una serie de medidas con las que no podría estar de acuerdo según sus principios, pero que, según lo que se dijo, venían impuestas desde Europa. Y yo me pregunto: ¿No hubiera sido mejor dimitir en ese momento? Si Zapatero hubiera salido diciendo: "Dimito porque soy incapaz de tomar decisiones que perjudiquen al obrero y la clase media y que vayan en contra de mis principios" ¿no tendría ahora el PSOE, capacidad moral para criticar al actual gobierno? Ahora, cuando veo a Rubalcaba hablar justo después del anuncio de los recortes, y lo escucho ofrecerle un pacto a Rajoy... a mi me entran ganas de llorar. ¿Un pacto? ¿De verdad? ¿Y la gente que votó a este partido que pensará? Los derechos no se pactan cuando te los están intentando robar. Los derechos se luchan, se consiguen, se persiguen. Pero claro, el PSOE no puede abrir la boca porque le lloverían recuerdos de la anterior legislatura. Esto es a lo que me refiero. Ir en contra de tus principios hace que no puedas volver a usarlos en tus argumentos. Siempre habrá alguien que te recuerde que una vez los traicionaste.

Cuando veo al señor Rajoy en el congreso no me lo creo. Rajoy es el presidente del gobierno. Zapatero considerado el peor presidente de la historia por muchos, y ahora nos gobierna un tio que perdió dos elecciones contra él. Estupendo. Creo que eso dice mucho de la inteligencia de este país. O de las alternativas. O de las dos cosas. El caso es que a este hombre le han dado una tijera desde Europa y se está llevando por delante cosas que hace unos años se consiguieron con tanto esfuerzo.
No contento con eso, anuncia los recortes y todos los de su partido se levantan a aplaudir. ¿Que aplauden? ¿Que hayan engañado al electorado? ¿Que vayan a reducir el consumo hasta límites insospechados? Todavía recuerdo cuando Esperanza Aguirre anunciaba mesas donde se recogían firmas contra la subida del IVA que pretendía hacer ZP. Que irónico es todo.

Hablando de la marquesa, hoy he visto un video que me horroriza. La prepotencia en persona. Un político despreciando a unos ciudadanos, una vez más. Le han preguntado a la señora Aguirre sobre la marcha minera. Ella, con media sonrisa, ha dicho que eran unos 20000, y que para conseguir un escaño en Madrid, hacen falta tantos votantes como para rellenar 3 campos de fútbol como el bernabeu. Claro, según ella son pocos, lo que parece no entender es que son personas. Y ella es una política que cobra porque en este país hay personas. Si estuviera gobernando a cactus o peces no estaría cobrando. Se le olvida a la señora Aguirre que en este país existen personas necesitadas y se dedica a reirse de ellos, como si tuviera el nivel intelectual de una medusa... o incluso menor. Y lo peor es que nadie de su partido hace nada, ni del partido contrario. Nadie dice nada. Es una dictadura a grandes rasgos. Los que gobiernan se ríen del pueblo, se mofan de la gente que sale a la calle a protestar, a pedir una vida mejor. Lo mejor de todo es que muchos de los que hayan salido hoy a la calle, probablemente les votaron. Pero eso ya no importa, lo votado, votado está.

Y yo me pregunto: Si un partido hace una serie de promesas electorales y luego las incumple una tras otra... ¿en que queda el poder del pueblo que, se supone, tiene la democracia? ¿En nada? ¿De verdad el pueblo no está legitimado para pedir que el gobierno desaparezca porque les han engañado? Y mucha gente ahora dirá: Es que no pueden hacer otra cosa. La gente que dice eso, una de dos, o es militante del PP, o es que no tiene capacidad de raciocinio. ¿No se puede hacer otra cosa? ¿Ni siquiera dimitir? No les tiembla la mano a ninguno del partido a la hora de recortar e incumplir promesas. Igual que no les temblaba la mano al criticar al PSOE por tomar medidas que ahora están endureciendo ellos. HIPÓCRITAS.

Pues sí, la política es hipocresía, es traicionar tus principios, es olvidarte de los votantes, de tus ciudadanos, de la gente que te ha puesto ahí. Todo esto lo sabíamos en el fondo. Lo que nos jode es que hoy nos lo han restregado por la cara. ¿A que estamos esperando? ¿A que sigan? ¿A que todo el mundo vea como España gana mundiales y Eurocopas y sale a la calle, pero no sale para defender sus derechos? Aunque la gente piense que esto no tiene solución, la tiene. Se llama PUEBLO. Se llama COMPROMISO. Se llama DEMOCRACIA.